Cómo estudiar una oposición: Estudiar una oposición puede parecer una montaña inalcanzable al principio. Horas y horas de temario, normas, presión, fechas inciertas y un mar de dudas sobre si estás haciéndolo bien.
Y no, no estás solo: la mayoría de los opositores se sienten así al empezar.
Lo que marca la diferencia no es solo la cantidad de tiempo que estudies, sino cómo lo haces, con qué enfoque, y desde qué mentalidad.
Estudiar una oposición no es como preparar un examen del instituto. Aquí entran en juego la planificación, la gestión emocional, los hábitos diarios y una estrategia realista.
En este artículo te compartimos una guía práctica y directa con las claves que sí funcionan. Si estás buscando un sistema que te ayude a rendir mejor, evitar el agotamiento y acercarte cada día un poco más a tu plaza… sigue leyendo. Esto es para ti.
Tabla de contenidos
Cómo estudiar una oposición: métodos que sí funcionan
Estudiar una oposición no es solo cuestión de fuerza de voluntad. Es un maratón en el que necesitas estrategia, constancia y equilibrio.
Si te estás preguntando cómo estudiar una oposición sin terminar agotado o frustrado, este artículo es para ti.
1. No empieces sin plan: diseña tu estrategia de estudio
Lo primero que necesitas no es un libro, sino un calendario.
Dividir el temario a preparar, asignar tiempos realistas y planificar descansos es clave.
✅ Empieza con un esquema general de los bloques.
✅ Asigna tiempos semanales a cada parte.
✅ Incluye simulacros, repasos y días libres.
Si estudias sin plan, lo más probable es que llegues tarde… o cansado.
2. Encuentra tu método ideal (no todos son iguales)
No hay una forma única de estudiar. Hay quien memoriza con esquemas, quién necesita mapas mentales, quien graba audios para repasar… Lo importante es encontrar tu forma.
Prueba varias técnicas al inicio:
- Método Pomodoro.
- Flashcards o tarjetas de memoria.
- Mapas mentales.
- Resúmenes orales.
- Técnica Feynman (explica como si enseñaras).
No te cases con una sola: combina y ajusta según el tema.
3. La importancia del repaso (y por qué muchos se lo saltan)
Una de las mayores trampas al preparar oposiciones es creer que “ya lo sabes” y que no lo olvidarás.
📌 El repaso sistemático es lo que consolida la memoria a largo plazo.
Planifica repasos espaciados atendiendo a la curva del video de EBBINGHAUS.
No repasar es como llenar un cubo con agujeros.
4. Simula el examen real desde el principio
Hacer simulacros desde el inicio cambia el juego.
No esperes a tener todo estudiado. Enfréntate desde el principio al formato real:
✅ Simulacros escritos.
✅ Exposiciones orales.
✅ Cronometrar el tiempo.
✅ Correcciones realistas.
Te ayudará a reducir los nervios y a detectar a tiempo los fallos más frecuentes.
5. Cuida tu mente y tu cuerpo: son tu verdadero temario
Una oposición no es solo estudiar. Es también cuidar tu energía y estabilidad emocional.:
👉 Haz ejercicio ligero a diario.
👉 Duerme bien (sí, esto también se entrena).
👉 Come alimentos que te mantengan despierto y sin picos de azúcar.
👉 Reserva tiempo para desconectar y socializar.
Un cuerpo cansado y una mente saturada no aprenden, solo sobreviven.
6. Rodearte de personas que te impulsen
Estudia solo, pero no te sientas solo.
Tener un grupo de compañeros de estudio o una comunidad donde compartir avances, dudas y miedos puede ser lo que te salve en los días grises.
Y si no lo tienes, en EFOS+FORMACIÓN te ofrecemos acompañamiento y seguimiento personalizado.
Conclusión
Estudiar una oposición no es estudiar como antes.
Es desarrollar una estrategia personalizada, flexible y sostenible en el tiempo.
Y sobre todo, es creértelo. Porque si otros lo han conseguido, tú también puedes.
¿Quieres una planificación realista y apoyo constante en tu estudio?
En EFOS+FORMACIÓN te damos herramientas, seguimiento y motivación para que tu esfuerzo se traduzca en resultados.